La planta fideera a partir de la harina de arroz, ubicada en pleno centro de Rocha, es una de las pocas industrias que se mantiene firme en el medio local, llegando a mercados como Chile, Paraguay y Sudáfrica.
Tiempo de Noticias – La ex planta de fideos a partir de la harina de trigo, que en la década del 70 se llamó Arycia, a manos de su creador, Antonio Rótulo, más allá de sus cambios y transformaciones, sigue de pie y colocando el producto hacia diferentes y exigentes mercados mundiales. Un cambio: desde la década del 90 con harina de arroz, productos especialmente para celíacos, sin gluten.
Aquella industria en el marco de un Rocha pujante e industrial, pesquero, con plantas de baldosas, fábrica de ladrillos y de hilados, con el paso de los años fue cediendo y pasando a negocios de representaciones.
Las nostalgias no solo abarcan la música, también aquella mentalidad industrial. Se fueron perdiendo no pocos puestos de trabajo, casi siempre calificados.
Se trabajaba hasta en tres turnos sin parar al cabo de las 24 horas: de 13 a 21; de 21 a 05 y de 05 a la hora 13. Otros tiempos. Mejores salarios, tal vez, poco interés por ser funcionario de la Intendencia de Rocha y difícil en aquellos años encontrar personal para sopletear y juntar las hojas de los árboles en los paseos públicos, tal como sucede en el presente Siglo XXI.
Actualmente, la fábrica de fideos de la ciudad de Rocha, ubicada por calle Treinta y Tres y también por la calle 19 de Abril, sufrió transformaciones y evoluciona acompasada a los nuevos tiempos.
Aquella fábrica Arycia, que luego pasó a manos del empresario, Níver Benencio, que fue también explotada brevemente por una sociedad anónima, quedó en alquiler su planta industrial a manos de una gigante uruguaya: Coopar.
Y esta industria prestigiosa a nivel nacional con su raíz y base en Lascano, logró modificaciones en las máquinas cuando corría la década de los 90, hasta lograr diversas variedades de fideos con la harina de arroz. Los populares Fetuccini sin tac, es decir, libre de gluten y posibles para aquellos ciudadanos que son celíacos. Es una de las tantas variedades de fideos con harina de arroz que suelen encontrarse en las góndolas de los supermercados uruguayos. Y fundamentalmente se exportaron desde Rocha a España y Canadá para posteriormente ir cambiando.
Actualmente, el exigente mercado chileno pide el fideo con harina de arroz elaborado en Rocha, también algo en Paraguay y otros lugares del mundo, incluso se sumaría Sudáfrica.
Sin prácticamente ruidos y alejado del mundo político en gran medida, solo se sienten las máquinas por la calle 19 de Abril, en sus veredas con el clásico sonido de las harineras que luego por un sistema de aire transportan las mismas hacia la prensa y luego a la nidera que causa no pocos dolores de cabeza, si por algún motivo no se mantiene la masa con sus características en el sinfín. Posteriormente, vendrá el secado y la planta de envasado.
No menos de 15 trabajadores rochenses todo el año. Con salarios por encima de la media local, con avance en la planta alta del edificio por calle Treinta y Tres, destinado entre otras cosas, a un notable comedor para los trabajadores que son parte de un sello de avanzada en el mercado laboral e industrial. Orgullo de una empresa, que es una de las pocas industrias que quedó en pie en nuestra capital departamental. Entre nostalgias, no es menos cierto que en este lugar también hay presente y futuro. Tal vez, sea el último faro que alumbre el camino por donde recuperar el esplendor de aquellos días, de un Rocha con trabajo y personal calificado, haciéndose valer esta realidad en los comercios de nuestro medio.
Eduardo González Segredo – Corresponsal Tiempo de Noticias
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