Tiempo de Noticias – La aprobación en el Senado del marco legal que habilita la construcción del nuevo aeropuerto de Rocha abrió un escenario inédito para el departamento. Para el intendente Alejo Umpiérrez, la señal política es contundente: “marcará un antes y un después para el desarrollo turístico del este del país”. Su visión es clara: una terminal aérea moderna, estratégicamente ubicada, puede transformar la conectividad, atraer inversiones y consolidar una identidad productiva que ya no dependa exclusivamente de la estacionalidad.
El proyecto prevé una pista de 2.000 metros, servicios aduaneros, hangares y una zona operativa diseñada para recibir inicialmente vuelos privados y chárters. En esta primera etapa, el aeropuerto se enfocará en la aviación ejecutiva y turística, pero dejando abierta la posibilidad de incorporar vuelos internacionales a medida que la demanda justifique el salto. Las dos localizaciones en estudio —entre Laguna de Rocha y Garzón o en el entorno de La Paloma— responden a criterios ambientales, logísticos y de conectividad con la zona de mayor dinamismo del departamento.
La decisión del Senado fue unánime: 27 votos en 27. Ese respaldo refleja que, más allá de los matices partidarios, existe una convicción transversal sobre la oportunidad estratégica que representa el aeropuerto. Umpiérrez recordó que las conversaciones con el grupo Eurnekian, operador del aeropuerto de Laguna del Sauce, se remontan a varios años. Según aseguró, la extensión de la concesión fue el elemento que permitió dar forma jurídica y financiera al proyecto.
“Este no será un aeropuerto monumental, sino un punto de partida. La idea es comenzar con una infraestructura acorde a la demanda actual, pero con potencial para crecer”, subrayó. La ejecución, insistió, dependerá de la reglamentación final en Diputados y de la decisión de inversión privada, que —según dijo— ya manifestó interés concreto en avanzar durante este período de gobierno.
Conectividad aérea y ambición regional
La apuesta no está aislada. Rocha vive un momento de expansión poco frecuente. El último censo lo ubicó como uno de los departamentos con mayor crecimiento poblacional del país, impulsado por un fenómeno de radicación estable, expansión turística y diversificación económica. La Intendencia quiere acompañar ese proceso con obras estructurales: el fideicomiso aprobado por 40 millones de dólares permitirá financiar nuevas etapas de urbanización, infraestructura vial, mejoras costeras y obras en la capital departamental.
“Rocha no puede seguir dependiendo únicamente de la temporada. Necesita dar un salto cualitativo en conectividad y servicios para transformarse en un territorio de oportunidades permanentes”, expresó Umpiérrez en reiteradas ocasiones.
El frente fluvial: la hidrovía del Cebollatí como complemento logístico
El desarrollo aéreo no es la única transformación estratégica en marcha. La reactivación de la hidrovía del Cebollatí —proyecto binacional que conectará la Laguna Merín con la Laguna de los Patos y, mediante dragado del Canal San Gonzalo, con puertos brasileños— avanza con solidez técnica. Brasil se encuentra en la etapa de adjudicación del dragado, mientras Uruguay analiza tres puntos de operación: la boca del Cebollatí frente a Isla del Padre, las bocas del Tacuarí para carga de graneles y San Luis como nodo para transporte de pasajeros y turismo.
Un estudio de la Cepal confirmó la viabilidad del proyecto y destacó su potencial para abaratar costos logísticos, diversificar la matriz productiva y generar un impacto profundo en la actividad agropecuaria y forestal del departamento. La doble vía —aérea y fluvial— posicionaría a Rocha en un mapa logístico regional que, históricamente, le fue esquivo.
Un territorio que busca consolidar su futuro
El desafío de los próximos años será convertir estos anuncios en infraestructura tangible, con impacto directo en el empleo, la movilidad y el turismo. Para Umpiérrez, la conjunción entre aeropuerto, hidrovía e inversión pública abre la posibilidad de que Rocha deje de ser un destino que se “enciende” en verano y pase a ser un polo permanente de desarrollo y conectividad.
En palabras del propio intendente: “La infraestructura define el destino de un territorio. Y este proyecto puede definir el destino de Rocha por las próximas décadas”.
Tiempo de Noticias / Redacción – Diego Landache
Toda la información en Tiempo de Noticias diario impreso






Comentarios